ADLO cumple un año
¡Cumplimos un año! Lo celebramos con estas imágenes de este oso juguetón grabadas por nosotros en la provincia de León hace pocos días. La Asociación fue registrada en agosto por sus 3 socios fundadores, pero no fue hasta comenzado el otoño que iniciamos la actividad, después de todo el papeleo burocrático y planificación. Un año lleno de trabajo, donde el grupo ha ido creciendo con mucha cautela para garantizar la seguridad de ambas especies con las que trabajamos: el oso pardo y el lobo.
Hemos creado dos líneas de trabajo. La divulgación, más adaptada a nuestros tiempos a través del podcast (con buena acogida) y que en breve se grabará una nueva tanda de episodios, cuando los osos descansen y nos dejen trabajar en el ordenador. En un futuro nos gustaría hacer divulgación presencial y actividades paralelas, pero sin correr, ¡es nuestro primer año. También, en casos de indefensión del oso pardo hemos alzado la voz cuando tocaba.
La segunda línea de trabajo es el trabajo de campo: fototrampeo, observación, analizar información, clasificar otras especies detectadas y hacer red con otras organizaciones que velan por estos animales. Una tarea apasionante, pero dura cuando los resultados no son buenos después de dar vueltas muchas horas por las montañas, o cuando constantemente recibes críticas y mensajes negativos por privado o en público de gente contraria a estas especies, o cuando toca apurarte los bolsillos para sacar el proyecto adelante… pero la Asociación seguirá trabajando para concienciar de que es necesario un ecosistema completo, donde no falte ninguna pieza.
Nos quedamos con todo lo que hemos aprendido y observado en las cámaras, analizando, estudiando y contrastando comportamientos del oso pardo del Pirineo respecto al oso pardo del Cantábrico, donde está mucho más integrado en sus vidas. Estos días en la Cordillera Cantábrica ha sido un aprendizaje constante y emocionante. Hemos hablado con vecinos, con naturalistas y expertos y la sensación que nos ha quedado es que en el Pirineo todavía hay mucho trabajo por hacer.
¡Vamos a por el segundo año!